El Ministerio de Relaciones Exteriores checo, que últimamente se ha visto
obligado a cerrar varios de sus consulados y embajadas en el exterior,
planea invertir millones de euros en la reforma de sus edificios. Según
informó el diario Právo, los costos de reconstrucción del Palacio
Černín, de Praga, superarán los 23 millones de euros. Por su parte, la
reforma de los edificios ministeriales situados en la capital búlgara,
Sofía, costará unos nueve millones de euros y la de la embajada checa en
Santiago de Chile, más de 1.700.000 euros.