Aleš Hušák, director de la casa de apuestas y loterías Sazka, en
situación de insolvencia, permanecerá por el momento en su puesto. Así
lo ha decidido el abogado Josef Cupka, encargado del caso. Los acreedores
de Sazka proponen que la compañía sea vendida en una subasta pública. El
grupo financiero Penta, por ejemplo, está preparado para ofrecer más de
80 millones de euros por las licencias de Sazka, según su portavoz, Martin
Danko. La directiva de Sazka critica que Penta quiera comprarla, cuando ya
es propietaria de Fortuna, la empresa rival.