El Instituto de Arqueología de la Universidad de Bohemia del Oeste en
Pilsen explorará dos de los once campos de prisioneros comunistas, los
llamados Nikolaj y Eliáš, este verano cerca de Jáchymov. Se trata de
campos donde, entre los años 1949-1958, los prisioneros políticos
tuvieron que trabajar en las minas de uranio. La investigación es parte de
un proyecto europeo en el que participan seis universidades.
Empleados y estudiantes ya realizaron una investigación el año pasado en
Lety, cerca de Písek, en el sur de Bohemia, y en Treblinka, en Polonia,
donde se instalaron campos de concentración durante la Segunda Guerra
Mundial. En mayo de este año, los arqueólogos de Pilsen participaron en
una investigación en Falstad, Noruega, donde se construyó un campo de
concentración durante la ocupación nazi.