Se entregó en la noche de este lunes el premio al mejor fútbolista checo
del año, que fue a parar a las manos del guardameta titular del Sevilla,
Tomáš Vaclík.
El portero del equipo español está realizando una temporada notable llena
de grandes actuaciones, a pesar de que en los últimos meses su equipo haya
pasado por un mal momento de forma.
En segundo lugar quedó el futbolista del Hoffenheim Pavel Kadeřábek, y
en tercer lugar el jugador del Slavia Praga Tomáš Souček.
Además, en la gala de la edición número 54 de este premio fueron
también galardonados el jugador del Jablonec David Lischka, como mejor
talento joven, mientras que el premio a mejor entrenador se lo llevó Pavel
Vrba, quien dirige al Viktoria Pilsen.