El Fiscal general del Estado, Pavel Zeman, ha criticado los intentos de
socavar la confianza pública en los fiscales checos por parte de algunos
políticos.
En un comunicado enviado a la agencia de noticias ČTK, el principal fiscal
del país dijo que los ataques infundados a los fiscales eran un ataque al
orden legal.
La declaración se produce en respuesta a un ataque del presidente Zeman
contra el fiscal jefe de la ciudad de Olomouc, Ivo Ištvan, quien está a
cargo de un caso de presunta corrupción en la oficina antimonopolio checa
y en la firma Kapsch.
En una entrevista para TV comercial, el presidente Zeman sugirió que Ivo
Ištvan era excesivamente activo en un esfuerzo por redimir su reputación
luego de supervisar un caso que involucraba a la ex jefe de personal del
gobierno, Jana Nagyová, lo que condujo a la caída del gobierno del primer
ministro Petr Nečas y que, según el presidente no había llegado a nada.