Desde la entrada de Chequia en la Unión Europea los precios de la cerveza
en este país aumentaron un 50%. A pesar de ello, hasta el presente siguen
siendo los más bajos de los países miembros. En los restaurantes checos
un jarro de medio litro de cerveza de barril Pilsen se vende por 1.85 euros
aproximadamente, mientras que en muchos otros países europeos el precio
alcanza el doble o triple, de acuerdo con Josef Krýsl, experto cervecero
checo.
Krýsl acotó que en Alemania y Francia por ejemplo, un medio litro de
cerveza cuesta entre 4 y 5 euros. Donde más cuesta la cerveza en Europa,
según el experto, es en Escandinavia, seguida del Reino Unido y Bélgica.
Añadió que aunque las fábricas de cerveza en Chequia temen subir los
precios de esa bebida espumosa para no perder a clientes, está convencido
que los checos, en tanto que una nación cervecera, seguirían tomándola
aunque su precio alcanzara 4 euros, o sea más del doble.