En caso de que Chequia no proceda a la edificación de nuevas plantas
eléctricas, incluidos nuevos bloques de las plantas nucleares, en el
futuro podría carecer de electricidad. Así lo dijo en conferencia de
prensa en Praga el viceprimer ministro para Industria y Comercio, Karel
Havlíček, basándose en un estudio del sistema de electrificación del
país, elaborado recientemente por la compañía ČEPS.
De acuerdo con el ministro, de no avanzarse en el desarrollo de ese
sistema, en 2030 Chequia podría transformarse en un país totalmente
dependiente de los suministros de electricidad desde el exterior. Además,
gran escasez de electricidad podría haber en toda Europa, lo que llevaría
al brusco aumento de su coste. Havlíček insistió en la necesidad de
considerar la ampliación de la central nuclear de Temelín, además de la
construcción de un nuevo bloque en la central de Dukovany. El ministro
recalcó que la energía nuclear es la única vía posible, ya que para el
futuro no se puede contar ya con el carbón.