En una serie de artículos dedicados a Milan Kundera, el diario francés Le
Monde describió esta semana el camino profesional y la vida a ese escritor
de origen checo. Los primeros dos capítulos estuvieron dedicados a su vida
en Checoslovaquia hasta su emigración en 1975. Kundera con su esposa, que
entonces eran seguidos por la Policía Secreta comunista, recibieron un
permiso de salida del país por 730 días.
El tercer capítulo describió el camino de Kundera al exilio en Francia,
en Rennes, y el cuarto sus comienzos en París en los años 80, donde luego
a lo largo de unos 10 años dirigía un seminario de literatura en la
Escuela Superior de Ciencias Sociales. En el quinto capítulo Le Monde se
refirió a las traducciones y novelas de Kundera escritas en Francia y el
último capítulo titulado Kundera, añoración de Praga, centró su
atención en el sentido del exilio. Después de los cambios democráticos
en Europa los esposos Kundera, que viven en París, estuvieron unas seis
veces de visita en la República Checa. No obstante la esposa del escritor
Věra sigue deseando regresar de forma definitiva.