En los próximos dos años, el Ejército debería enviar menos tropas a las
misiones internacionales según ha acordado el Gobierno checo.
La información ha sido dada a conocer por el ministro de Defensa, Lubomír
Metnar vía Twitter. La mayoría de los soldados volverá a operar en
Afganistán, Malí, el Báltico e Irak, según una propuesta que aún no ha
sido considerada por el Parlamento.
Según la propuesta, la República Checa debería participar en las
misiones de la OTAN, la Unión Europea y la ONU. La forma exacta de acción
de los soldados checos puede cambiar sobre todo en Afganistán, donde a
finales de febrero Estados Unidos firmó un armisticio con los talibanes.