Noticias Domingo 14 de NOVIEMBRE de 1999

Por Pavla Jedlickova

Ayuda humanitaria a Turquía

Según decidió ayer, sábado, el Gobierno checo en su sesión extraordinaria, la República Checa entregará a Turquía una ayuda humanitaria equivalente a un millón y medio de coronas checas. Dicha cantidad está destinada a las víctimas del terremoto devastador que nuevamente afectó a Turquía el viernes pasado. Con el mismo fin de participar en el rescate de personas de los escombros partió esta manana rumbo a Turquía un avión cargado de un grupo de socorristas checos con perros entrenados. Además, según informó el premier checo, Milos Zeman, a las regiones afectadas fue dislocada una parte del hospital de campana del Ejército checo que ya ha empezado a atender a los heridos. La Cruz Roja de la República Checa organiza también una recolecta pública en cuyo marco los ciudadanos checos pueden entregar cubiertas y productos alimenticios e higiénicos que serán enviados a Turquía.

El ministro de Defensa checo en Namibia

El ministro de Defensa checo, Vladimír Vetchý, finalizó el sábado pasado su visita oficial a la República de Suráfrica y se trasladó a Namibia. Es el primer alto representante del Estado checo que realiza la visita a ese país que obtuvo la independencia en 1990. Vetchý fue invitado el sábado a la cena ofrecida por su homólogo namibiano, Erikki Nghimtina, pero a las deliberaciones sobre la cooperación militar entre ambos países se reunirán los dos ministros el lunes próximo.

El décimo aniversario de la canonización de la beata Inés

En muchas iglesias checas fueron oficiadas ayer, sábado, las misas en honor a la Santa Inés, canonizada hace diez anos por el Papa Juan Pablo Segundo en la basílica de San Pedro de Roma. La canonización tuvo lugar el 12 de noviembre de 1989, en vísperas de los acontecimientos que desembocaron en el desmoronamiento del régimen totalitario de la extinta Checoslovaquia. Al acto solemne estuvieron presentes por aquél entonces miles de peregrinos checoslovacos y la ceremonia fue transmitida en directo por la televisión estatal. Por primera vez desde la toma del poder por los comunistas en 1948, los ciudadanos checoslovacos tuvieron la posibilidad de ver en la pantalla televisiva una misa, el Vaticano y al Papa; hecho que influyera de manera decisiva en el restablecimiento de la democracia en este país a partir del ano 1989. Con este motivo, el obispo checo, Jaroslav Skarvada, bendijo en la Catedral de San Vito, en el Castillo de Praga, un cuadro de la Santa Inés que a partir del sábado pasado está expuesto en la Capilla de San Venceslao de la Catedral.

El milenio de la llegada de monjes al monasterio de Sázava

Unas decenas de los creyentes checos conmemoraron ayer, sábado, en el monasterio benedictino de Sázava, en Bohemia central, el milenio de la llegada de los monjes a esta región checa. El monasterio fue fundado por el príncipe premislita Oldrich y el eremita San Procopio que se convirtió en su primer abad. El monasterio fue en la Edad Media uno de los centros más destacados de la instrucción y la cultura medievales de las tierras checas. Con motivo del milenio fue oficiada en Sázava una misa por el obispo Ivan Ljavinec que se refirió en su sermón también al décimo aniversario de la Revolución de Terciopelo que restableció en este país la libertad religiosa.