Egiptólogos checos descubren una valiosa momia

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Los egiptólogos checos descubrieron en el yacimiento arqueológico de Abusir, en Egipto, una momia de 2500 años de antigüedad. Del sueño despertaron, en sentido figurativo, al sacerdote Neko. Ahora restauran y transcriben las inscripciones de su cámara funeraria y de su ataúd para averiguar quién fue el dignatario Neko.

El descubrimiento de la momia del sacerdote Neko causó sorpresa a los egiptólogos checos. No lo esperaban.

La momia fue hallada en Abusir, a 25 kilómetros de El Cairo, en el interior del extenso complejo funerario subterráneo del noble Iufaa, administrador de los palacios reales a finales del sexto siglo antes de nuestra era. Los arqueólogos checos están investigando la tumba de Iufaa desde hace diez años.

Descubrieron un sistema de corredores, recintos de culto con bóvedas de adobe, nichos parecidos a cámaras funerarias y dos féretros de madera-uno encerraba los restos mortales de un hombre mayor y otro de una mujer, probablemente hermana del poderoso Iufaa.

Quedaba por descubrir la cámara funeraria con la momia de la esposa de Iufaa. Los arqueólogos pensaban que pudiera encontrarse detrás de una entrada tapada, situada a una profundidad de 22 metros en el laberinto subterráneo del complejo funerario.

Cuando retiraron los bloques de piedra calcárea, a los arqueólogos les esperaba una gran sorpresa: delante de ellos se abría una cámara funeraria cuyas paredes estaban cubiertas con textos rituales en medio de los caules se leía el nombre del difunto: el sacerdote Neko. Su momia reposaba en un féretro doble. El antropólogo Evzen Strouhal estima que al morir el sacerdote Neko tenía entre los 45 y los 50 años de edad. Parece que fue pariente del dueño del complejo funerario, el noble Iufaa.

Cuando los arqueólogos entraron en la cámara funeraria del sacerdote Neko, cambió el microclima del recinto que no se había modificado durante 2500 años. Empezó la carrera contra el reloj para conservar la momia, el ataúd y las piezas de ajuar funerario del difunto que constaba, entre otras piezas, de cuatro canopas de alabastro. Canopas son vasijas que sirven para depositar las vísceras retiradas durante la momificación.

En el ajuar funerario del sacerdote Neko no faltaban las estatuillas de los servidores que tienen la obligación de ejecutar en la ultratumba las tareas laborales de su difunto dueño. Neko recibió para el viaje al otro mundo estatuillas de 403 servidores. Grupos de a diez servidores estaban "comandados" por una estatuilla encargada al parecer de la supervisión. Había también capataces encargados de vigilar a grupos más numerosos de estatuillas. Directamente sobre la momia se conservaron 18 amuletos destinados a proteger el cuerpo del difunto.

Los egiptólogos checos ahora restauran y transcriben las inscripciones de la cámara funeraaria y del ataúd para obtener más datos sobre el sacerdote Neko.

Los especialistas del Instituto Checo de Egiptología quieren concluir la próxima primavera la investigación de todo el conjunto funerario subterráneo donde fue descubierta la momia del sacerdote Neko. Las autoridades egipcias apremian a los arqueólogos checos ya que quieren abrir la tumba al turismo internacional.

Los egipcios planean próximamente abrir a los turistas toda la necrópolis de Abusir. Los arqueólogos checos que trabajan en Abusir desde 1960, elaboraron un proyecto de cómo minimizar el impacto de las hordas de turistas sobre el área de inestimable valor arqueológico, pero la solución definitiva corresponde a las autoridades egipcias.