¿Amenaza la corona fuerte a los exportadores checos?

Desde principios de este año, la corona checa está batiendo un récord tras otro. Su alta cotización alegra a los consumidores, ya que abarata los artículos, pero preocupa cada vez más a las empresas porque hace más dura la competencia en el mercado. Los más perjudicados son, no obstante, los exportadores.

Varias empresas textiles checas redactaron en abril pasado el "Llamamiento de Trutnov" en el que protestaron contra la alta cotización de la moneda nacional, exhortando al Gobierno y al Banco Central Checo a adoptar medidas.

El Llamamiento ya ha sido firmado por más de 140 empresas. Figura entre ellas Skoda Auto, el único fabricante de turismos y el mayor exportador checo. El presidente de la Junta Directiva, Vratislav Kulhánek, explica qué impacto tiene la fuerte corona en esa empresa automotriz:

"En el extranjero recibimos las mismas cantidades por nuestros vehículos porque la actual crisis de la industria automovilística en el mundo nos impide subir los precios. Y como compramos el material en coronas y nuestros gastos son también en coronas, resulta que por un euro recibimos menos coronas, lo que reduce la rentabilidad de la empresa. Otra consecuencia de la fuerte moneda es que la competencia extranjera importa unidades más baratas, ofreciendo las más diversas ventajas de venta, con lo que gana nuevos clientes en detrimento de nosotros".

¿Qué medidas tuvieron que adoptar?

"Tuvimos que fijar tarifa con lo que compensamos una parte del impacto negativo. Reducimos drásticamente nuestros costes para ser competitivos. Y es todo lo que se puede hacer por el momento. Está claro que estas medidas restrictivas se manifestarán tarde o temprano: invertiremos menos dinero y tendremos que postergar varios planes que queríamos realizar este año".

¿Por qué se han sumado al "Llamamiento de Trutnov"?

"Para solidarizar con otros exportadores checos más pequeños y por lo tanto más afectados por la fortaleza de la corona. Sin embargo, no estamos de acuerdo con varias exigencias contenidas en el "Llamamiento", tales como la cotización fija de la moneda y la destitución de la gente del Gobierno o del Banco Central Checo. Es absurdo, pero sobre todo ésta no es la solución".

¿Qué hay que hacer entonces?

"En primer lugar, el sector político debería hacer un análisis detallado del estado de la economía y de las razones del crecimiento del Producto Interior Bruto. Estamos convencidos de que el continuo fortalecimiento de la corona es especulativo: No es normal que la moneda se fortalezca en once meses en más del 15 por ciento. Los inversionistas extranjeros deberían recibir también una clara señal de que los incentivos ofrecidos por el Gobierno crean un enorme endeudamiento del país".

¿Qué impacto tiene la fuerte corona en el mercado checo?

"Basta con ir a cualquiera tienda del país. Los artículos extranjeros reemplazan a los checos porque son más baratos, lo que está diezmando al cuarenta por ciento de las empresas nacionales que no exportan".