Hoy conversaremos con una ciudadana española. Se llama Cristina Labrador,
es de Madrid, pero reside desde hace mucho tiempo en Canadá. La joven
Cristina llegó recientemente a la República Checa inspirada por la mágica
historia de su capital, Praga, y confesó que permanecerá al menos un mes
en este país, donde ha iniciado trabajos de voluntaria en una conocida
organización humanitaria.