¿Prohibido dar a luz en casa?

Cada año decenas de mujeres en la República Checa prefieren dar a luz en casa. La mayoría de los médicos checos se opone a esa idea, explicando que conlleva enormes riesgos. Ello ha motivado recientemente a las autoridades del ministerio de Salud Checo a presentar un proyecto de ley que podría prohibir a las parteras ejercer su labor fuera de las maternidades. De ese modo pretenden disminuir el riesgo de muertes durante el parto.

Los expertos coinciden en que si la mencionada ley fuera aprobada, aumentaría el número de mujeres que parirán sin la asistencia de un obstetra. Una de ellas podría ser la señora Johana Kubanova. Sus dos primeros hijos nacieron en la residencia estudiantil donde vivía. Hoy está nuevamente embarazada y asegura que su tercer hijo también nacerá en casa.

"El problema es que por el momento no he podido encontrar a nadie que quiera ayudarme. Las pocas parteras a domicilio que se muestran abiertas a asistirme residen demasiado lejos. Estoy de acuerdo con una especialista austríaca, que vive cerca de mi ciudad, pero me temo que si se aprueba la nueva ley sobre partos no vendrá. Independiente de ello, estoy decidida a dar a luz en casa con o sin asistencia", explica Kubanova.

Muchos médicos checos advierten sobre los peligros de dar a luz fuera de un centro médico especializado, con personal capacitado. Otros incluso, consideran que esa práctica en la República Checa es ilegal. Ese es el caso del doctor Zdenek Hajek, obstetra del Hospital General de Praga.

"Los partos caseros están prohibidos, son una tontería. Así se desprende de las políticas del Ministerio de Salud. En este país está vigente la ley sobre la salud del ser humano, según la cual el médico es responsable por el cuidado de una mujer embarazada. El día que las parteras a domicilio reciban la preparación adecuada, podríamos comenzara a hablar si es adecuada o no esa práctica", dice el doctor Hajek.

Entretanto, Zuzana Stromerova, de la agrupación ciudadana Centro por un Parto Activo, opina todo lo contrario. "Los partos caseros son absolutamente legales y las parteras a domicilio sí están en capacidad de asistir el parto. Resulta que muchos doctores toman a las mujeres embarazadas como si estuviesen enfermas. Solo que el embarazo nunca ha sido ni será una enfermedad", constata Stromerova confesando que ha asistido a varias mujeres durante el parto y nunca se presentaron dificultades.

Sólo en una ocasión debieron solicitar asistencia médica. "La mujer sangraba demasiado, más de lo habitual. Pero sabía lo que le esperaba y aún así rechazaba dar a luz en una maternidad. Luego de recibir asistencia, la hemorragia se detuvo y su bebé nació sin problemas. En todo caso, siempre pongo como condición a las mujeres que se informen bien sobre lo que les espera. En esos casos siempre los riesgos son mínimos", explica la señora Stromerova.

Y ustedes estimados oyentes... ¿qué opinan?