Taxistas de Praga - un dolor de cabeza para los turistas

Los servicios de taxi en Praga son uno de los principales problemas que en los últimos años encara la Alcaldía de la capital checa. Los taxistas deshonestos que a veces cobran a los turistas más del triple del precio normal tienen tan mala fama que ante sus prácticas se advierte en las guías turísticas de varios países.

Foto: Štěpánka Budková
Según un reciente sondeo de opinión, casi el 80 por ciento de los habitantes de Praga critica a los taxistas, considerando que su actitud daña la imagen de la República Checa en el exterior.

En esta edición de A Toda Marcha varios habitantes de la capital checa compartieron con nosotros su opinión sobre los taxistas de Praga. La señora Petra, médico de profesión, reaccionó con cierta dosis de enfado.

"Son terribles. Cobran mucho dinero, son poco honestos y no se puede confiar en ellos. Cuando necesito un taxi, lo pido por teléfono a una de las compañías que ofrecen ese tipo de servicios. Nunca subiría a un taxi así sin más en la calle", dijo Petra.

El ingeniero Ricardo admitió que tiene escasa experiencia con los taxistas en Praga, porque suele viajar en los medios de transporte urbano.

"Prefiero utilizar los medios de transporte públicos, cuya red en Praga es muy buena. De los taxistas deshonestos se ha escrito mucho en la prensa local. Uno de mis amigos es taxista y es una persona excelente y honesta. Creo que nunca es bueno generalizar. Tengo también a muchos amigos extranjeros y algunos han tenido mala experiencia con los taxistas locales. Es lamentable que por culpa de algunos individuos deshonestos, ya sean taxistas o mozos en los restaurantes, que también suelen cobrar el doble a los extranjeros, los turistas se hagan una mala idea de Praga y de la República Checa", sostuvo Ricardo.

Honza también considera que los más afectados por los taxistas deshonestos en Praga son los turistas extranjeros.

"Cuando se habla mucho de algo, siempre suele haber un poco de verdad en ello. Los turistas extranjeros no saben checo, desconocen los precios locales y estoy seguro de que hay taxistas que se aprovechan de ello. He leído en la prensa que en varias guías de turismo en el extranjero se advierte ante los taxistas de Praga. A mí eso me molesta, porque la capital checa es bella y la mayoría de los checos somos gente bondadosa y honesta. Cuando un extranjero que nunca ha estado en la República Checa viene acá con temor previo de ser engañado, me avergüenzo de los taxistas locales", señaló Honza.

Este pintor de brocha gorda contó también que una vez se peleó en el metro de Praga con un revisor que quiso multar a un grupo de turistas españoles ya mayores que, por desconocer el sistema de los billetes local, los llevaban sin haberlos marcado. "Fue mi deber defender a esos turistas, porque el revisor los trató irrespetuosamente", insistió Honza.

"La situación en los servicios de taxi refleja el estado general de las cosas en el sector de empresa en el país. Hay gente honesta, así como individuos deshonestos que aprovechan todo en su propio beneficio".

Ésa fue la opinión de la ingeniera Lenka sobre el tema. La médico Petra nos contó por su parte, de la desagradable experiencia de un conocido suyo con un taxista en Praga.

"A las ocho y quince de la tarde paró a un taxi en la avenida junto al río Moldava, subió al taxi y, a su casa que quedaba a unos pocos kilómetros de distancia, llegó a las tres de la madrugada tras haber sido golpeado y sin su billetera. Estaba además en muy mal estado psicológico. Al taxista nadie lo ha visto, no hay testigos directos del asalto y la reacción de la Policía fue que es recomendable llamar siempre por teléfono los servicios de taxi", concluyó Petra.

La mayoría de los checos consideran que el problema en torno a los taxistas no se solucionará mediante la adopción de directrices y normativas. Confían en que sea una cuestión de tiempo, según lo resumió el ingeniero Ricardo.

"Estoy convencido de que si se ampliaran los servicios de taxi, o sea, si fuera mayor la competencia en el sector, se reduciría seguramente el número de taxistas que engaña a los clientes. Paulatinamente así, ese tipo de estafa se regularía por si solo de alguna manera. Lo mismo vale para los mozos en los restaurantes y otro personal que trabaja en los servicios públicos", recalcó Ricardo.

Mientras tanto, desde principios de este año la Alcaldía de Praga realizó más de doscientos controles del trabajo de los servicios de taxi. Nueve taxistas fueron privados de su licencia, otros dieciséis casos se están tramitando.

Y ¿Qué opinan ustedes, amigos, sobre los taxistas deshonestos?