Ciudadanos checos recuerdan el año 1968

La senadora, Jaroslava Moserová

Hace 35 años Checoslovaquia fue invadida por los tanques soviéticos que aplastaron el proceso reformador conocido como Primavera de Praga. ¿Cómo recuerdan los políticos y los ciudadanos checos los días de la ocupación?

La senadora,  Jaroslava Moserová
Para la aplastante mayoría de la nación checa, la ocupación fue un verdadero choque. En los primeros instantes, muchos se negaban a creerlo.

La senadora, Jaroslava Moserová, recuerda el temor que le causaron los aviones que en amanecer del 21 de agosto de 1968 sobrevolaban Praga.

"Lo más sorpresivo fue para mí el raro silencio en el que se envolvió la ciudad. Fue un silencio horroroso, interrumpido sólo por los disparos y los motores de los aviones. Praga parecía una ciudad muerta. Yo trabajaba en aquella época como médica y en varias ocasiones me tocó atender a ciudadanos checos heridos por los soldados soviéticos".

Para el ministro de Cultura, Pavel Dostál, se trató de momentos muy difíciles.

"Yo tuve en Rusia muchos amigos, sobre todo de la esfera teatral y artística. Siempre fui un gran admirador de la cultura rusa. De manera que para mí fue incomprensible de que mi país fue ocupado por las tropas soviéticas. Pero pronto me di cuenta de que mis amigos no son culpables de los actos de su gobierno".

Una de las ciudadanas de Praga recuerda el miedo a los tanques soviéticos.

"Vivíamos entonces cerca del Castillo de Praga, zona herméticamente cerrada por los tanques soviéticos. Cada día tuvimos que ir al trabajo a pie, alrededor de una cadena infinita de tanques y carros blindados. Cada vez que veía aquello lloraba porque me hacía recordar la ocupación de Praga por los nazis. Pero todo pasó y a mí me resta tan sólo conservar la profunda convicción de que momentos como esos ya no se repetirán jamás".