Los estudiantes checos quieren ir de Erasmus

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Los estudiantes siguen interesados en intercambios académicos. Las universidades reanudan sus actividades y están haciendo lo posible para acoger a estudiantes como en los años anteriores.

El transcurso del programa Erasmus al igual que de otros intercambios universitarios se ha visto perjudicado este semestre. La pandemia del coronavirus cerró centros educativos en muchos países del mundo, incluida Chequia, y limitó la posibilidad de viajar. La inseguridad afecta también el próximo curso académico que generalmente se inicia en Chequia a finales de septiembre o principios de octubre.

La Facultad de Filosofía de la Universidad Carolina,  foto: VitVit,  CC BY-SA 4.0

No obstante, según informó en entrevista con Radio Praga Internacional Sylvie Boumová, jefa del Departamento de Relaciones Internacionales de la Facultad de Filosofía de la Universidad Carolina de Praga, en gran parte, el programa estará volviendo a la normalidad.

“En el próximo curso académico 2020/2021, los intercambios de estudiantes y del personal educativo se realizarán de manera estándar, es decir en base a contratos bilaterales vigentes. En la Facultad de Filosofía, los estudiantes que piensen venir a estudiar desde el extranjero, asistirán a cursos de manera regular como en los años precedentes“.

La Facultad de Filosofía de la Universidad Carolina cuenta, según confirmó Boumová, con alrededor de 350 contratos con universidades de todo el mundo, de ellas unas 290 radican en Europa y participan en el programa de intercambio Erasmus. Los centros educativos han diferido en sus respuestas a la crisis y, según explica Boumová, la situación puede ser diferente incluso entre dos universidades de un mismo país.

“Cada universidad ha reaccionado de manera distinta. Algunas cancelarán sus clases presenciales y para el semestre de otoño planean impartirlas en línea, también para sus propios estudiantes. Y no han cancelado lo que es la movilidad. Otras sí organizarán clases presenciales pero no aceptarán estudiantes ni enviarán a los suyos al extranjero. Es imposible generalizar”.

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Cada país se enfrenta a diferentes restricciones y las universidades deben respetar las medidas establecidas por las autoridades. En torno a los estudiantes de intercambio, las decisiones de la Facultad de Filosofía se desprenden de las recomendaciones del Ministerio de Relaciones Exteriores en base a las cuales la facultad evalúa el riesgo de realizar intercambios con ciertos países.

La facultad es consciente asimismo de que algunos de los estudiantes posiblemente tengan que cumplir un periodo de cuarentena tras llegar a Chequia. El sistema fue puesto a prueba ya durante la pandemia actual, cuenta Boumová.

“Las residencias y comedores de estudiantes asignaron parte de su capacidad de alojamiento para la cuarentena. Ya sea para estudiantes que regresaban de países de riesgo o en caso de enfermedades. Esto forma parte de un plan de crisis y la universidad volverá a actuar de la misma manera si la situación lo exige”.

Los estudiantes checos podrán realizar intercambios en ciudades de Europa y otros continentes. Muchas de las solicitudes, según explicó Boumová, están siendo resueltas de manera individual, de acuerdo a las condiciones en los países de destino. Por ejemplo, muchos estudiantes que tenían planeado estudiar en América Latina están intentando aplazar su estancia para el semestre de verano, dada la recomendación del Ministerio de Relaciones Exteriores checo de no viajar a la región.

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Boumová destacó que la pandemia no ha reducido el interés de los estudiantes por venir a estudiar a la República Checa o de los estudiantes checos por salir al extranjero. Realzó asimismo la eficiente comunicación entre las universidades y la flexibilidad a la hora de resolver los obstáculos que la pandemia ha puesto en su camino.

“Registramos, y nos da gusto, que no ha disminuido tanto el número de estudiantes y su interés. Ya sea por venir a Chequia o por salir al extranjero. Las universidades siguen nominando a estudiantes. Por supuesto, si la situación cambia en alguno de los países, acordaremos el aplazamiento o la cancelación de la estancia. En este aspecto contamos con una muy buena comunicación y bastante flexibilidad con nuestras universidades socias”.

Las estadísticas de la Facultad de Filosofía de la Universidad Carolina indican que en comparación con el año pasado, se registra un 10 % de estudiantes salientes menos. Mientras que en 2019, unos 250 estudiantes checos salieron de Erasmus a alguna de las universidades europeas, este año cuentan con 230 solicitudes. La pandemia se ha visto reflejada de manera más evidente en el interés en intercambios organizados en base a acuerdos intergubernamentales o interuniversitarios con centros fuera de Europa. A diferencia de los 80 estudiantes del año pasado, la facultad cuenta con solo 40 solicitantes para el 2020.

En cuanto a la llegada de estudiantes extranjeros a la facultad dentro del programa Erasmus, en 2019 acogió a 300 estudiantes, para este año anticipa unos 200. Para las universidades no europeas, el número de estudiantes disminuirá en unos 10 o 20 estudiantes, según anticipa el departamento.

Sylvie Boumová considera que se trata de un buen resultado, considerando la situación. En su opinión, posiblemente ayudó que el Departamento de Relaciones Exteriores se esforzó por motivar a los estudiantes a que participaran en el programa Erasmus y otros programas de intercambio.

Cursos de checo

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La Facultad de Filosofía de la Universidad Carolina ha preparado una novedad que podría resultar atractiva para los estudiantes extranjeros. Se trata de un curso especial de checo que, además de ser presencial, se dará también en línea, explica Boumová.

“La situación actual nos incitó a abrir este curso también en línea para el próximo curso escolar. El curso ofrecerá el mismo contenido y enfoque al igual que consultas individuales de pronunciación, por ejemplo. Queremos complacer a estudiantes interesados en este programa que no puedan asistir de forma presencial. Así se podrán inscribir al curso en línea y más tarde, cuando puedan viajar, podrán continuar de manera presencial”.

La facultad ha preparado asimismo un segundo programa. Está destinado a personas que estudian la lengua y la cultura checa en universidades en el extranjero. En este caso se requerirá un nivel mínimo de A1 de checo. En caso de estar interesados, los estudiantes podrán venir a estudiar a la Facultad de Filosofía también de modo presencial.

Foto: Comisión Europea
Autores: Romana Marksová , Irina Ručkina
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