Los expertos checos se imponen en Iraq

Craig Stapleton y Janina Hrebícková, foto: CTK

Desde hace casi medio año funciona al sur de Iraq un hospital de campaña checo. La Embajada checa fue reabierta hace poco en la capital iraquí, Bagdad. Sobre la situación en ese país conversamos con Janina Hrebícková, jefa de la misión checa que participa en la administración iraquí temporal.

Janina Hrebícková lleva en Iraq alrededor de dos meses. ¿Cuál es, según su opinión, el principal logro de los expertos checos que trabajan allí?

Craig Stapleton y Janina Hrebícková,  foto: CTK
"El mayor logro que hemos alcanzado es convencer a los estadounidenses, británicos, australianos y otros países, sobre la capacidad de los checos. A pesar de que la República Checa no es un país fuerte desde el punto de vista económico, los checos supieron incorporarse bien al grupo de expertos. Los iraquíes aprecian su aporte y saben comunicarse con ellos".

Señaló Janina Hrebícková, agregando que el hospital de campaña checo, localizado en la ciudad de Basora, al sur de Iraq, desde principios de mayo, realiza un trabajo admirable.

"El hospital goza de mucho prestigio y desempeña un papel importante para la República Checa. Teniendo el hospital en Basora, para la República Checa será más fácil en el futuro de encontrar su posición política, y económica en el Iraq postbélico".

Un programa gubernamental checo posibilita trasladar, a la República Checa, a niños iraquíes que no pueden ser operados en ese país.

Cinco niñas y cuatro niños iraquíes con problemas cardíacos llegaron el pasado domingo a Praga, donde serán atendidos. Los pequeños pacientes, acompañados por sus padres, fueron trasladados a la capital checa junto con los primeros militares checos que terminaron su misión en Iraq.