Los niños checos son cada vez más agresivos

Foto: Alexander Popelier / Stock.XCHNG

Las relaciones de convivencia entre los niños checos van a peor en los últimos años. Aumenta la agresividad de los menores, así como la utilización de vulgarismos en su lenguaje. Así lo demuestra un reciente estudio efectuado por la Universidad Carolina de Praga.

Foto: Alexander Popelier / Stock.XCHNG
El acoso escolar, la agresividad y desobediencia de los niños es un fenómeno al que se enfrenta actualmente la mayoría de los educadores en Chequia. Hallar un instrumento eficaz para combatir esta problemática no es fácil, ya que los niños dirigen su agresividad frecuentemente contra sus propios profesores, ridiculizándolos por ejemplo en Internet por medio de grabaciones hechas con sus celulares durante las clases.

Durante el año pasado, unos 300 profesores han llamado a una línea de teléfono especial de consultas para educadores, pidiendo ayuda de los psicólogos en el tratamiento con los niños agresivos. Lo alarmante es que diferentes formas de acoso se practican también entre los niños en edad preescolar, indica Radovan Bogdanowicz, de la Inspección Escolar Checa.

“La Inspección Escolar Checa resuelve cada año numerosos casos de agresividad en centros preescolares, en parvularios. Naturalmente, las formas y la intensidad de la agresividad en las relaciones de convivencia de estos niños son diferentes a la que notamos entre los alumnos de la enseñanza básica y media”.

Foto: archivo de Radio Praga
El estudio de la Universidad Carolina de Praga, titulado ‘Los profesores en medio de la transformación’, sostiene que la educación de los niños ocasiona dolores de cabeza no sólo a los educadores sino también a los padres de los menores, que frecuentemente no saben qué hacer con sus hijos desobedientes.

La autora del documento, Dana Moree, de la Facultad de Humanidades, señala que el cambio negativo en el comportamiento de los menores se debe en gran medida a la transformación de la sociedad y sus valores después del año 1989.

”Con la democracia llegaron también otros cambios, como por ejemplo, se propagó el individualismo, que acentúa el éxito personal y las grandes ganancias como el único camino hacia el poder. Esto obligó a los ciudadanos, incluidos los padres de familia, a trabajar más para ganar más y asegurar materialmente a sus hijos. Por este motivo los padres ya casi no tienen tiempo para compartir con sus hijos. Los niños carecen del cariño de sus padres y este déficit de atención puede traducirse negativamente en su conducta agresiva en la escuela”.

Dana Moree indica que el problema de la creciente agresividad de los niños se registra también en muchos otros países del mundo, especialmente en los estados más avanzados económicamente. La profesora insiste no obstante en que los niños son víctimas de la sociedad moderna y que la causa de su comportamiento inadecuado y cada vez más agresivo radica precisamente en el déficit de la atención que sufren durante la infancia.