¿Necesitamos la pequeña y mediana empresa?

¿Necesita la República Checa la pequeña y mediana empresa? ¿Apoya el Gobierno lo suficiente a los empresarios de ese sector? Ayer jueves, destacados economistas checos y alemanes discutieron estos temas en la aldea de Krusovice, Bohemia Occidental.

Los participantes en la conferencia se dieron cita en ese foro de discusión ya por quinta vez. Los oradores coincidieron en que el lento desarrollo de la mediana y pequeña empresa afecta negativamente a la economía checa, y expresaron que las autoridades del país hasta el presente no han logrado crear un ambiente legislativo favorable para que los pequeños empresarios pudieran desarrollar sus actividades de manera más eficaz.

Las pequeñas y medianas empresas en la RCh se desempeñan, sobre todo, en el sector de la hostelería, el turismo, el comercio y la industria de construcción. La asesora fiscal Jana Alfery especificó qué problemas tienen que afrontar principalmente.

"Las pequeñas y medianas empresas tienen problemas con conseguir pedidos, alcanzar créditos bancarios, sufren de escasez del capital y tienen que enfrentar una gran competencia. Asimismo el clima económico no es muy favorable en la República Checa, ya que existe indisciplina de pago y perduran problemas con el Código Comercial y el catastro parcelario".

Para el Estado las ventajas de la existencia de la pequeña y mediana empresa son indudables: representan una enorme parte del Producto Interior Bruto, un 65 por ciento, siendo a la vez importantes subcontratistas.

Por su parte, Lothar Spath, presidente de la compañía alemana Jenoptik AG, sostuvo que la pequeña y mediana empresa es la columna vertebral de la economía del país. El ex ministro paralelo de la Industria de Alemania Spath agregó que los entes más pequeños tienen mayor chance de sobrevivir que los colosos grandes, ya que lo importante es la rapidez, no el tamaño. "En la época prehistórica, los dinosaurios se extinguieron y sobrevivió el insecto", concluyó Lothar Spath.