Zlín se esfuerza por limpiar el nombre del rey del zapato Jan Antonín Bata

Estatua de J.A Bata (Foto: Martina Stejskalova)

El 2 de mayo de 1947 el Tribunal Nacional de Checoslovaquia sentenció a 15 años de prisión al renombrado fabricante de calzado Jan Antonín Bata por no haberse declarado públicamente a favor de la resistencia antinazi en el exterior. Sesenta años después se celebró en la ciudad de Zlín una conferencia para limpiar el nombre del rey del zapato.

Tomás Bata,  a la derecha está la estatua de J.A Bata  (Foto: CTK)
Hace unos cinco años la Alcaldía de Zlín, Moravia Oriental, entabló contacto epistolar con las hijas de Jan Antonín Bata, Edita y Jana, residentes en Brasil. En 2005 los concejales de la capital del calzado de entreguerras aprobaron una declaración en la que estipulaban que se esforzarían por analizar de manera objetiva el caso de Jan Antonín Bata y por limpiar su nombre, como explicó el secretario del Ayuntamiento de Zlín, Zdenek Mikel.

"Estamos convencidos de que es necesario situar en el lugar correcto el nombre de Jan Antonín Bata en los anales de la historia de la ciudad de Zlín. Nadie pone en duda los méritos del fundador de la empresa, Tomás Bata, pero queremos que se sepa quién fue y qué hizo para el desarrollo de Zlín y posteriormente de Brasil su sucesor".

Jan Antonín Bata asumió las riendas del imperio de calzado de Zlín en 1932 tras la muerte de su medio hermano Tomás. En 1941 se vio obligado a refugiarse en Brasil debido a los nazis.

Dolores Bata Arambasic | Foto: Martina Stejskalová,  Radio Prague International
La nieta del empresario Dolores Bata Arambasic afirma que existen pruebas que confirman que Jan Antonín Bata apoyó al gobierno checo exiliado en Londres. Este donó al movimiento de resistencia checo unos 280 mil dólares, una suma correspondiente hoy día a unos entre cinco y diez millones de dólares, explicó a Radio Praga la señora Dolores, que participó junto con otros seis miembros de la familia en la conferencia de dos días de Zlín.

"Desde Zlín le escribieron que no firmara nada. Por eso dio su apoyo bajo un pseudónimo ya que su nombre no podía aparecer en ninguna parte. Lo hizo para poder salvar a sus paisanos".

Estatua de J.A Bata  (Foto: Martina Stejskalova)
A pesar de ello, los aliados pusieron el nombre de Jan Antonín Bata en la "lista negra" y en Checoslovaquia lo acusaron tras la guerra de colaboración con los nazis.

La sentencia de 1947 contra Jan Antonín Bata acusa una serie de graves fallos jurídicos. A sugerencia de las hijas de Bata, en 1994 el entonces fiscal general de la República Checa, Jirí Setina, presentó una queja debido a la violación de la ley. El Tribunal Supremo la rechazó prohibiendo a los tribunales ocuparse del caso. Ahora la familia Bata y la ciudad de Zlín dirigieron a los tribunales otra solicitud con el fin de renovar el proceso apoyada esta misma por nuevos documentos.

El pasado 2 de mayo, día del sesenta aniversario del veredicto contra Jan Antonín Bata, la ciudad de Zlín develó un monumento en honor al empresario frente al antiguo rascacielos administrativo del consorcio Bata. "Esta estatua refleja precisamente la postura de mi abuelo", sostuvo Dolores Bata Arambasic.