Los primeros ministros del V4 debatieron en Praga sobre las crisis de la UE

El primer ministro checo, Bohuslav Sobotka, considera que la crisis migratoria no acabará con la Unión Europea. En la Cumbre Europea de Praga, el jefe del Ejecutivo checo aseguró que el mayor peligro lo representan el populismo y la creciente frustración de la población. Sobotka estima que las agrupaciones radicales ofrecen soluciones fáciles que no conducen a ninguna parte, mientras que la frustración crece, porque Europa ha perdido la capacidad de vender sus éxitos a la población. El político checo llamó a los países europeos a crear condiciones para aumentar la confianza, al tiempo que rechazó que Europa se divida en varias uniones menores. Los primeros minstros del Grupode Visegrad evaluaron de manera positiva la presidencia checa. A partir del 1 de julio la jefatura rotativa pasará a Polonia, mientras que Eslovaquia presidirá la Unión Europea.