Pitos y vítores para presidente Klaus en celebración de Revolución de Terciopelo

La llegada del presidente Václav Klaus al monumento que recuerda los hechos de la Revolución de Terciopelo en la Avenida Nacional de Praga provocó los pitos que mostraban el descontento de unos, y por el contrario, los gritos que coreaban su nombre de otros. En el monumento se están entregando flores y encendiendo velas durante todo el día. El enfrentamiento verbal entre las decenas de seguidores y opositores de la gestión de Klaus, fue finalmente calmado por la intervención de la Policía, que despejó el camino del mandatario hasta la escultura. Klaus consideró una gran victoria democrática que la gente pueda gritar al presidente o a un primer ministro sin ser castigados.