Bozena Viková- Kunetická, la primera checa que incursionó en la alta política

Bozena Viková- Kunetická

La escritora Bozena Viková- Kunetická defendió los derechos de la mujer tanto en sus obras literarias como desde la tribuna parlamentaria. Criticó el celibato impuesto por el Estado a las funcionarias públicas. En 1912, cuando las tierras checas pertenecían todavía al imperio austro-húngaro, fue elegida diputada como la primera mujer de toda Europa Central.

Bozena Viková- Kunetická inició su labor en favor de la emancipación femenina cuando en la sociedad del imperio austro-húngaro reinaba todavía la convicción de que el destino de la mujer era ser el "ángel del hogar".

La escritora, dramaturga y política Bozena Viková- Kunetická asumió el compromiso de cambiar esa anticuada concepción del rol de la mujer. Luchó contra la educación conservadora de las muchachas e incluso se atrevió a abogar por la implantación del divorcio como solución de un matrimonio insoportable.

Además, con su ejemplo personal demostró que era posible reconciliar la labor literaria y política con el papel de madre, porque vivió en un matrimonio armónico y feliz.

Esta singular personalidad checa, que nació en 1862, hija de un comerciante de cereales, escribió sus primeros trabajos literarios a la edad de doce años.

En su juventud, Bozena Viková- Kunetická quería ser actriz. Fue discípula de la célebre artista dramática checa, Otýlie Sklenárová- Malá, y a los 19 años debutó en el primer escenario capitalino, el llamado Teatro Provisional. Al mismo tiempo empezó a publicar cuentos en la popular revista Svetozor.

Después de contraer matrimonio renunció al teatro y optó por consagrarse a las letras. La animó a seguir la carrera literaria el destacado poeta, escritor y periodista Jan Neruda.

Las obras completas de Bozena Viková- Kunetická constan de quince volúmenes. Entre 1892 y 1905 ganaron popularidad sus libros sobre temas psicológicos y sociológicos. Causó revuelo sobre todo su novela "Medrická", en la que narra cómo una maestra rural se rebeló contra el celibato impuesto por el Estado y optó por ser madre soltera.

El tema de la novela era muy actual. A finales del siglo XIX, en las tierras checas el 28 por ciento de los profesores eran mujeres. Después de casarse, las maestras y otras empleadas públicas eran despedidas ya que para el Estado sólo podía trabajar una mujer soltera. Si una mujer quería ejercer la profesión para la cual se sentía llamada, tenía que renunciar al matrimonio y a la maternidad.

En 1905 fue fundado en Bohemia el Comité para el derecho de sufragio de las mujeres. Siete años después, en 1912, tras el acuerdo con las formaciones políticas, dicho Comité lanzó la candidatura de la escritora y activista del Partido de los Jóvenes Checos, Bozena Viková- Kunetická. Resultó elegida diputada, pero no pudo ocupar su escaño en el Parlamento porque el príncipe Thun, alto representante del imperio austro-húngaro en Bohemia, se negó a extenderle el certificado de diputado.

Teatro Nacional de Praga en 1918
De esta manera, Bozena Viková- Kunetická no entraría en el Parlamento hasta el memorable 14 de noviembre de 1918, poco tiempo después de ser proclamada la independencia de Checoslovaquia. La escritora fue, primero, diputada de la Asamblea Nacional revolucionaria, y desde 1920 senadora del Partido Nacional Demócrata.

En su trabajo político se centró en la protección de las madres y de los niños. Reivindicó la igualdad entre hombres y mujeres en la familia. Ya que deseaba evitar que las mujeres fuesen sobrecargadas, abogó por la implantación de una red de guarderías infantiles.

Bozena Viková- Kunetická, que falleció en 1934, podría servir de ejemplo también a las checas contemporáneas que no son demasiado activas en la vida política. El porcentaje de diputadas y senadoras sigue siendo muy bajo.