Irak, la Unión Europea y la República Checa

Saddam Husein, foto: CTK

Para la República Checa el segundo mes de este año que recien empezamos se ha visto marcado por una intensa actividad política a nivel nacional e internacional que ha despertado pasiones.

Saddam Husein,  foto: CTK
La tensa situación en torno a Irak ha provocado una enorme ola de movilizaciones entre los adversarios de la intervención militar y los que la fomentan.

Los pacifistas enarbolan sus banderas y toman las calles de las ciudades europeas para tratar de frenar lo que podría convertirse en una terrible guerra. Bueno, no hay ninguna que no lo sea.

Los partidarios de la intervención de la guerra hablan desde foros más sofisticados, que las calles. Hablan entre ellos mismos, y con los que toman decisiones al respecto.

Se cobijan bajo aquello de que ellos son patriotas y por eso estan dispuestos a enviar a los soldados a la guerra. Los que toman las decisiones seguirán las batallas por los partes de guerra y a traves de los medios de comunicación.

foto: CTK
Pero como dijera recientemente el director de cine español Pedro Almodóvar "los pacifistas también somos patriotas".

El problema radica en que, como en todo, predominan los intereses de unos contra los de otros. Mientras Francia, Alemania y Bélgica prefieren una solución pacífica para desarmar a Saddam Husein; España, Gran Bretaña y EE.UU. están por la intervención.

En medio de todo se encuentra la República Checa y varios países candidatos a la Unión Europea. Antes de terminar su periódo presidencial Václav Havel firmó con siete primeros ministros europeos un artículo publicado en la prensa, conocido como "Carta de los Ocho", en el que se expresaba abierto apoyo a EE.UU. en su eventual cruzada contra Irak.

El primer ministro checo, Vladimir Spidla, se distanció de todo aquello, porque él personalmente se había negado a firmar el documento, a diferencia de sus homólogos de siete países europeos.

Jacques Chirac,  foto: CTK
No obstante, el presidente de Francia, Jacques Chirac, patriota y pacifista, ha logrado postergar la intervención militar en Irak, para ello se apoyó en Alemania. No hay que olvidar que París sostiene que busca una solución pacífica, pero que Bagdad debe cumplir, de lo contrario se aplicará la fuerza.

El presidente francés, fue muy explícito al decir a los países candidatos poscomunistas que con su apoyo a EE.UU. en momentos en que Europa -con excepción de España y Gran Bretaña- se eforzaba por un solución pacífica se habían comportado como de manera maleducada, que habían perdido una oportunidad de callar.

El Aeropuerto Internacional de Ruzyne,  Praga,  foto: CTK
Semejantes palabras sentaron muy mal entre los representantes de los países adeptos que asistieron a una reunión poscumbre extraordinaria muy malhumorados.

Los tambores de guerra se escuchan cerca de Irak, pero sus consecuencias pueden ser globales. La República Checa al igual que los demás países de la OTAN han intensificado sus medidas de seguridad ante un eventual ataque terrorista.

En el aeropuerto de Praga se pueden ver carros blindados y el número de policías en las calles es mayor de lo normal. La guerra no ha estallado, pero los ciudadanos de muchos países se levantan y acuestan con un único pensamiento: la guerra, que inminentemente se avecina.

Autor: Federico Picado
audio